Desarrollo del Fascismo
CAUSAS
En lo económico, Italia terminó La Gran Guerra debilitada, con las industrias del Norte inutilizadas, siendo rural y anticuada la base de la economía del resto del país. Una deuda exterior enorme que aumentó la inflación, lo que hizo que aumentase el coste de vida, mientras que los salarios disminuían y el número de personas sin empleo aumentase desmesuradamente.
El origen de la llegada del Estado fascista italiano, es la consecuencia de la crisis social, política y económica que sufrió Italia a finales de la Gran Guerra.
En lo social, los sectores de la clase obrera radical querían seguir el camino emprendido por los revolucionarios bolcheviques en Rusia, lo que hizo que las clases medias y la gran burguesía italiana, se viesen amenazadas y les condujo a unirse a los fascistas contrarrevolucionarios para preservar sus intereses.
En lo político, el nacionalismo italiano, se vio agraviado por los acuerdos de Paz de París después de la I Guerra Mundial. Italia reclamaba los territorios de Fiume y Dalmacia que no les fueron otorgados por Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, principales compromisarios en las negociaciones. De esta manera, el irredentismo fue ganando apoyos, incrementando el sentimiento nacionalista. A lo que hay que sumar la inestabilidad política que originó que entre los años 1919 y 1922 hubiesen 5 gobiernos diferentes.
CONSECUENCIAS
El régimen fascista abolió los derechos políticos, todo quedaba sujeto al Estado. Como dijo Mussolini, “Todo en el Estado, nada fuera del Estado, nada contra el Estado.
En 1925 el Partido Fascista quedó como un instrumento de propaganda, ya que el poder quedaba en manos de Mussolini al que se le denominó el Duce. La oposición fue eliminada y los intelectuales acallados. Se creó un tribunal especial para juzgar los delitos políticos y una policía la OVRA para perseguir a los disidentes.
El Estado ejercía un control total sobre la sociedad y sobre los medios de comunicación de los que se valía para su propaganda.
El Parlamento fue sustituido por la Cámara de los Fasci y de las Corporaciones.
Se defendía una política económica autárquica que aspiraba a la autosuficiencia.
Con los Pactos de Letrán, Italia reconocía la soberanía del Estado Vaticano y se reconocía la religión católica como oficial del Estado. De esta manera el Duce, arregló la situación con la Iglesia.
Italia conquistó en 1935 Etiopía, ganando el favor de casi todos los sectores de la sociedad italiana, en un afán de controlar el Mediterráneo. En 1936 firmó con Alemania la alianza del Eje Roma-Berlín que culminó en 1939 en el Pacto de Acero entre ambos estados, promulgando leyes contra los judíos. Ese mismo año invadió Albania.
El ejército italiano no estaba preparado para la guerra, por lo que no entró en la misma hasta que Alemania invadió Francia en junio de 1940.
A partir de 1940, Italia entró en la II Guerra Mundial como aliada de Alemania, luchando en África contra los británicos, invadiendo Grecia y uniéndose a los alemanes en el reparto de Yugoslavia, la invasión de la Unión Soviética y declarando la guerra a Los Estado Unidos de América.
El 28 de abril de 1945 Benito Mussolini fue derrocado y fusilado. El cadáver de Mussolini fue expuesto públicamente en las calles de Milán.
ACONTECIMIENTOS
En la década de los años 20, los partidos políticos más importantes en Italia eran: el Partido Popular Italiano, que era católico moderado. El Partido Socialista, que por problemas internos se dividió y de éste nació el Partido Comunista, de carácter revolucionario.
En 1921 nace el Partido Fascista, formado desde antiguos socialistas, como es el caso de Benito Mussolini, hasta ultraconservadores.
En 1922 consiguieron gobiernos locales y provinciales, con adeptos de la esfera empresarial, de la Iglesia y del Ejército.
Los obreros, ante el gran descontento, propiciaron la huelga general del 31 de julio de 1922 que fue aplastada por los fascistas con un gran número de muertos. La falta de respuesta a los dramáticos acontecimientos sufridos, por parte de los distintos gobiernos, favoreció el que la gente reclamara un gobierno fuerte y estable.
La marcha sobre Roma en 1922, dirigidos por Mussolini, movilizó a miles de fascistas que vestidos con las “camisas negras”, pretendían forzar la dimisión del gobierno. El Jefe del Gobierno pidió al rey Víctor Manuel III, Jefe del Estado, que declarase el estado de sitio para detener la marcha, pero éste se negó por temor a un guerra civil. Además la patronal y muchos sectores del ejército, estaban de forma clara a favor de Mussolini. El 29 de octubre de este año, el rey pidió a éste, la formación de un gobierno. Los fascistas se hacían con el poder con la conformidad del Jefe del Estado. Benito Mussolini, se convirtió en primer ministro.
Comenzó a gobernar en una coalición de partidos dentro de la constitución.
Posteriormente, las denuncias del diputado socialista Matteotti, sobre la violencia y abusos de los fascistas dio lugar a su secuestro y asesinato. El escándalo hizo que tanto dentro como fuera del país se volvieran en contra de Mussolini lo que casi acabó con su poder.
El rey no hizo nada, lo que le dio alas para suprimir cualquier tipo de oposición y en 1925 suprimió los partidos políticos, los sindicatos y la libertad de prensa y así nació el Estado Fascista.

El movimiento fascista se identifica con su líder indiscutido, Benito Mussolini.